En lo que empezó como una mucho más competitiva segunda parte a lo que fue considerada una contienda de una sola parte, Manny Pacquiao cobró su revancha el pasado Sábado por la noche desde un lleno MGM Grand Arena en Las Vegas, Nevada, sobre el antes invicto Timothy “Desert Storm” Bradley. En el primer encuentro del 2012, Bradley se llevó una muy controversial decisión dividida en un combate a doce vueltas, en el cual casi nadie lo vio ganar.
Incluyendo el mismo.
En tomas mostradas durante el 24/7de HBO, Bradley se le vio siendo llevado en silla de ruedas a una ambulancia después de la primera pelea, ya que se había lastimado los dos tobillos durante dicho combate. Mientras era transportado, Bradley contesto cuando se le pregunto que le había parecido la decisión, diciendo que tendría que ver la pelea nuevamente para ver quien ganó en realidad.
Esta vez no hubo controversia o duda de quien en verdad ganó la pelea. Bradley empezó la pelea boxeando ligeramente con similares rápidas manos al zurdo Pacquiao. Parecía que si Bradley continuaba con la estrategia, el hubiera vencido a Pacquiao, pero inexplicablemente, inclusive para su entrenador Joel Díaz, Bradley cambió el plan de pelea y fue tras Pacquiao intentando noquearlo.
No funcionó.
A pesar de lastimar a Pacquiao en el cuarto, Bradley no fue capaz de cerrar el telón, mientras que el filipino de 35 años de edad demostró tener aun mucho en el tanque, tomando la pelea desde sexto asalto, fácilmente venciendo a uno de los mejores cinco peleadores en la lista de los libra x libra de cualquiera.
Luego de una actuación cuidadosa sobre Brando Ríos el pasado Noviembre en China, Pacquiao se vio de regreso aunque perdiendo uno o dos pasos de velocidad. Pacquiao le demostró a Bradley y al mundo del boxeo el hecho que no ha perdido su “instinto asesino” puesto que se vio intentando terminar a Bradley durante varios momentos del combate a doce asaltos.
Ahora la gran pregunta es ¿Contra quien se enfrentará Manny Pacquiao en su siguiente combate?
Un contingente quiere ver una quinta ante Juan Manuel Márquez. Un gran miembro de ese grupo es Freddie Roach, quien han dicho después de la pelea del Sábado por la noche que una quinta de la saga JMM-Pac, es lo que el quiere próximamente para borrar la imagen de ese Pacquiao tendido sobre la lona, el resultado de una perfecta mano derecha de Juan Manuel Márquez, en el sexto asalto de la ultima pelea entre los dos en Diciembre del 2012. El problema con este escenario es que una importante pieza del crucigrama, Márquez, ha dicho que no tienen ningún interés en una quinta con Pacquiao. De hecho, ha Márquez se le ofreció la cantidad más grande de dinero en su carrera para una pelea, para ser el compañero de baile de Pacquiao este pasado Sábado, pero no aceptó y a su vez decidió tomar una peligrosa pelea para mantenerse activo ante Mike Alvarado.
Otros piensan que Bradley tendría que tener otra oportunidad ante el congresista filipino. Algunos utilizan el argumentos que con la victoria esta Sábado, Pacquiao tiene dos peleas sobre Bradley sin importar lo que dice el record. Al final del día, una victoria es una victoria y hay una opción viable para un lucrativo desquite.
A Pacquiao se le ha ofrecido una fecha en Noviembre de este año, pero obviamente ningún oponente. Será Márquez? Lo más seguro es que si. Con una victoria sobre Alvarado, Márquez podrá inclusive pedir una mayor bolsa que la ofrecida previamente.